2017/Grupo5/DimensionamientoComercial
Si bien el sector petroquímico argentino se ve afectado por cuestiones del mercado interno, en particular por el déficit energético, el desacople del ciclo económico local evidencia que su desempeño no está directamente vinculado al mismo. Actualmente sus ventas se dirigen al mercado local, pero aquella producción que no pueda colocarse internamente es un saldo exportable que las empresas redirigen hacia otros mercados. Un aspecto central en este análisis es comprender cómo se relacionan las empresas petroquímicas con las del sector plástico. Esta relación se da a través de un vínculo comercial directo o a través de distribuidoras. Para comprar directamente a una empresa petroquímica es necesario reunir una serie de requisitos. En primer lugar, comprar grandes volúmenes de resina, ya que no se hacen despachos menores a un camión completo. En un sector en el cual el 70% de las empresas son PyMEs, muy pocas cumplen este requisito. A su vez, desde el sector comercial de las empresas petroquímicas se evalúan otros aspectos para proveer en forma directa a un cliente, como la capacidad financiera de la empresa y las condiciones edilicias para recibir la carga y preservar las resinas. Aquellas que logran establecer este vínculo directo, suelen participar también de programas de cooperación tecnológica o de responsabilidad social empresaria. Sin embargo, en la mayor parte de los casos la relación es mediada por un distribuidor. Estas empresas distribuidoras no pertenecen formalmente a las empresas petroquímicas, pero sí tienen la representación oficial de sus productos. Los distribuidores ofrecen lotes de producto fraccionados en pequeños volúmenes y financiamiento en la compra. Sin embargo por desempeñar este rol, los distribuidores acrecientan considerablemente el precio de las resinas. Esto nos conduce al problema del precio de los insumos, aspecto que tanto la cámara empresaria como los propios empresarios aducen como principal factor explicativo de la falta de competitividad del sector, y que es analizado en la sección 5. 3.2. Aguas abajo: los mercados-cliente de la industria plástica La principal aplicación de los productos plásticos es en envases y embalajes, que según datos de CAIP (2014) representa el 45,5% del total producido. Un 13% se explica por productos destinados a la construcción, seguido de otras industrias (la industria eléctrica y electrónica representa un 10% y la industria automotriz un 8%) y productos de 11